Al término de la asamblea de los delegados de la Rama Combustible, realizada en el sindicato de camioneros, el secretario adjunto, Pablo Moyano brindó detalles sobre la situación actual del sector combustible y los conflictos que se están planteando, especialmente en relación con YPF.
Durante la reunión con trabajadores y delegados de combustible, Moyano explicó que se ha decretado el estado de alerta y movilización debido a dos conflictos importantes. Uno de ellos es el planteamiento de YPF en la zona patagónica, donde la empresa ha transmitido la posibilidad de cerrar 55 pozos de producción a partir del 1º de abril. Esta medida afectaría a cerca de 2500 camioneros, quienes serían enviados a sus hogares con solo el 80% de su salario no remunerativo, sin garantía de poder volver a trabajar en el futuro.
El otro conflicto destacado por Moyano es la falta de homologación del último acuerdo paritario del 45%, lo cual también contribuye a la tensión en el sector. Ante estas situaciones, Moyano advirtió que podrían llevar a un gran paro nacional de transporte de combustible, exclusivamente responsabilidad del Gobierno Nacional.
En relación con YPF, Moyano subrayó la importancia de garantizar la estabilidad y continuidad laboral de todos los trabajadores, especialmente aquellos que transportan el combustible en la zona patagónica. También mencionó la expectativa de que se pague el aumento acordado del 25% en marzo y el 20% en abril, señalando que de no cumplirse esta disposición, se tomarán medidas a nivel nacional en el sector de combustible.
Pablo Moyano mostró la preocupación y la determinación del sindicato de camioneros en defender los derechos y las condiciones laborales de los trabajadores del sector combustible, en medio de desafíos y conflictos que demandan respuestas urgentes por parte de las autoridades pertinentes.